La naturaleza obliga a administrar

La naturaleza obliga a administrar

La sostenibilidad ambiental y la gerencia del desarrollo plantean el reto de reinventar el perfil profesional de los gerentes.

Las devastadoras inundaciones han puesto al descubierto un agudo problema de gerencia: faltaron gerentes para que tanto empresas como instituciones del sector público previeran los desastres ocurridos; y es evidente que faltan gerentes debidamente calificados para lidiar con los damnificados, encontrar soluciones de vivienda, hacer frente a brotes de enfermedades y posibles epidemias, y contribuir a restaurar el órden social.

¿Deben los gerentes contar con conocimientos de sostenibilidad ambiental? Los estudios de Administración y el MBA buscan formar gerentes atentos a la responsabilidad social de la empresa y cuando mucho, cumplir con la legislación ambiental. Pero en América Latina pocas escuelas dedican atención a la gestión del medio ambiente.

El cambio climático traerá cada vez más desastres ambientales a países como Colombia. De allí que la formación de los gerentes deberá reforzarse: que los administradores al servicio de la administración pública y de las empresas -como aquellas en Cali y Cartagena donde la creciente de los ríos irrumpió en sus instalaciones, y en empresas agrícolas que perdieron sus cosechas- deberán contar con una formación más amplia, que abarque fenómenos ambientales, sus riesgos, formas de manejo y estrategias de prevención.

El actual debate en el Gobierno sobre las prioridades de reconstrucción -elegir cuáles obras son imprescindibles y cuáles postergables- es ilustrativo de la falta de preparación de las instituciones para lidiar con el problema ambiental. En zonas sujetas a futuras amenazas de la naturaleza, las administrciones deben idear nuevas soluciones y evitar reconstruir lo que había, que implica enfrentar figuras políticas, industriales de la construcción y otros grupos de interés que buscan beneficiarse del caos imperante.

La sostenibilidad ambiental -al igual que la gerencia del desarrollo- plantea un reto para reinventar el perfil profesional de los gerentes. Deberán adquirir conocimientos y competencias que van más allá de la administración tradicional: contar con un enfoque interdisciplinario, una visión eco-sistémica que permita plantear estrategias y soluciones eficaces ante los retos ambientales que cada vez más deben sortear las organizaciones.

Cada vez más escuelas de Administración ofrecen estudios enfocados en la gestión ambiental. Otras permiten a sus estudiantes cursar asignaturas electivas en escuelas y facultades de Derecho, Ciencias Sociales, Ingeniería y Economía. El próximo paso podrá ser la introducción de módulos y talleres que capten la esencia de principios de ecología, ingeniería, sanidad y otras disciplinas relacionadas con lo ambiental.

De igual manera, los profesionales de las ciencias naturales especializados en lo ambiental -los que están al servicio de instituciones públicas y organizaciones sin ánimo de lucro- requieren fortalecer sus conocimientos de administración.

Las escuelas de Administración deberán contribuir al conocimiento de la gestión ambiental en las organizaciones y a difundir la relación entre la sostenibilidad ambiental y el desarrollo. Deberán formar gerentes conocedores de las tendencias emergentes en los mercados verdes, las exigencias ambientales de las cadenas productivas globales y las oportunidades que brinda la biodiversidad, gerentes que se desempeñen en nuevos cargos en sectores como la energía, el agro y la minería.

BART VAN HOOF

HENRY GÓMEZ SAMPER

Profesores, Facultad de Administración, Universidad de los Andes